ANDY WARHOL

En este primer cuatrimestre de la asignatura de Historia del interiorismo tuvimos que leer un libro y posteriormente hacer un trabajo sobre uno de los dapítulos. 

Yo elegí el libro de Iñaki Ábalos, La buena vida. Visita guiada por las casas de la modernidad. El capítulo que mas me llamó la atención fue: De las comunas freudomarxistas al loft neoyorkino, así que decidí ampliar la información sobre Andy Warhol. Aquí os dejo parte del trabajo.

Andrew Warhola fue un artista plástico estadounidense que nació en 1928 en Pittsburgh, Estados Unidos. Inició sus estudios de arte en el Carnegie Institute of Technology, entre 1945 y 1949. Ese mismo año, establecido en Nueva York, comenzó su carrera como dibujante publicitario para revistas como Vogue, Harper's Bazaar, Seventenn.

Al mismo tiempo que ejercía en el mundo de la publicidad pintaba lienzos basándose en la temática cotidiana, publicidad o cómic, los cuales expuso en diversas galerías. Eliminó progresivamente de sus trabajos cualquier rasgo expresionista hasta reducir la obra a una repetición seriada de un elemento popular procedente de la cultura de masas, el mundo del consumo o los medios de comunicación.


En 1962 pasó a de utilizar como método de trabajo un proceso mecánico de serigrafía, esto le hizo alcanzar su cota máxima de despersonalización. Reproducía sistemáticamente mitos de la sociedad contemporánea, sus ejemplo mas representativo es la serie dedicada a Marilyn Monroe.

De esta misma década es su célebre tratamiento de las latas de sopa Campbell.
En otras ocasiones, plasmó crudamente situaciones reales, como accidentes, luchas callejeras, funerales o suicidios; dentro de esta temática Electric chair es una de sus obras más significativas.

Una faceta notable en su obra es su potentísima fuerza visual, procedente de sus conocimientos sobre los mecanismos del mundo de la publicidad. En 1963 creó la Factory, taller en el que se reunió con numerosos personajes de la cultura underground neoyorkina.

Fue uno de los primeros creadores en explotar conscientemente su imagen con objetivos autopromocionales; de ese modo, y mediante un proceso de identificación, adquirió a los ojos del público trascendencias propias de un producto publicitario más.

En 1963, inició una carrera cinematográfica basada en los mismos principios que su obra plástica (como la repetición visual), de fuerte contenido sexual y erótico: Empire, Kiss, Chelsea girls.

Fue en los años 40 cuando las comunas rusas revolucionarias comenzaron con una forma de vida liberal conviviendo en masas. Pero es en los años 60 cuando esta forma de vida será la de la generación “beat” americana, constituida principalmente por pintores de Nueva York.

Esta forma de vida fue trasladada a la vida profesional y a la forma de trabajar a través de una convivencia que daba sus frutos mediante el trabajo colectivo, la puesta en común y las reuniones y fiestas sociales de la época hasta altas horas de la madrugada.

Como máximo referente de esta tipología tanto de trabajo como de vida encontramos el puesto de trabajo que Andy Warhol generó a lo largo de los años 60 y que tanto dio que hablar. El estudio del propio artista: The Factory, situada en la ciudad de los rascacielos, en el 231 de la calle 47.

En este espacio creativo, Warhol luchaba por convertirse en maestro de todas sus artes: pintura, publicidad, fotografía, diseño, música, cine... con una imaginación única, una inagotable curiosidad y un retorcido sentido del humor bajo una personalidad pública muy reservada. Con todos estos ingredientes, Warhol creo una nueva forma de ver y vivir el arte.

Es en esta época cuando se empieza a hablar del “Loft”, un concepto de vivienda iniciado por la ocupación de almacenes y talleres industriales por parte de los artistas de los años 60, planteando su transformación como viviendas y estudios.

Ábalos habla del loft como “una forma de habitar alternativa, una forma de pensar, proyectar y vivir en nuestro tiempo.” Un tiempo siempre actual, ya que después de 50 años, es la tipología moderna por excelencia. Habitar, pensar, proyectar y vivir son exactamente los valores que persigue el centro para crear cada uno de los habitáculos de cada uno de los jóvenes que formen parte del centro.

Uno de los aspecto mas visibles del loft es el desorden, tanto el formal como el espacial, debido a que cualquier espacio puede mutar y dar función a otro tipo de necesidades. El loft nunca descansará y siempre estará dispuesto a la creatividad de sus habitantes.